Manuel Montes Jaén nace en 1964 en la ciudad de Cádiz, en una familia de clase media. A la edad de 2 años, su familia se traslada a Chiclana de la Frontera, donde él vive actualmente.

Desde muy niño sintió la curiosidad por las maravillas que iba descubriendo en la naturaleza y optó por guardar esos detalles en sus primeros bocetos que dibujaba en láminas de papel y que con posterioridad reflejaría con su cámara fotográfica.

Ya como adolescente, realizó sus estudios de bachillerato en el Instituto Poeta García Gutiérrez de Chiclana, con su vocación hacia la naturaleza y hacia la Ciencia Botánica muy latente.

En 1993 decidió dar un paso más, estudiando en la Universidad de Ciencias Biológicas en Granada, donde se especializó en Botánica, optando por la Fitopatología y Nutrición Vegetal.

En el campo de la fotografía se inició de forma autodidáctica, incorporando a esta pasión la perspectiva que le iban aportando sus estudios académicos y sus propias inquietudes.

En los primeros años, durante su etapa en el bachillerato, optó por la macrofotografía, porque siempre tuvo una querencia por la búsqueda de los detalles más sutiles y de cómo plasmarlos con su particular forma de percibir el mundo a través de sus ojos y a través de su objetivo. Su propia dedicación le ha llevado a perfeccionar su técnica fotográfica, convirtiendo esta vocación en su principal instrumento de expresión vital y particularmente, de su especial vínculo con la naturaleza.

Este camino es el que plasma y comparte en esta exposición, dejando aflorar su forma de percibir la naturaleza, que entiende como la esencia pura de la vida misma, y lo hace sin manipular elementos fotográficos, algunos que se incluyen en los planos capturados.

Por otro lado, siempre ha destacado la importancia que tiene en su obra la labor divulgativa y del conocimiento de los distintos entornos que explora y plasma en sus fotografías,  desplazándose por distintos emplazamientos de la provincia de Cádiz.

Como se puede percibir en sus capturas, su pasión y encantamiento son las plantas y es por ello por lo que ha dedicado buena parte de su vida a observarlas y diseccionarlas en su propia inspiración, para captar el instante justo, el que le conmueve, el instante que conecta tanto los detalles estáticos como los científicos en un solo plano.

Comparte su parte vocacional y pasional con su faceta laboral, desarrollando su profesión en el Club Náutico de Sancti Petri, donde de otra forma su contacto con la naturaleza se prolonga, rodeado de mar, de cielo, de arena, de las gaviotas, de las que dice que no son malas compañeras. Y entre barcos y el discurrir de las mareas, sigue tejiendo su particular universo, imaginando el próximo instante que le gustaría plasmar y el camino que seguirá para descubrirlo en su próximo viaje.

Esta exposición es una pequeña recopilación de tomas naturales y compuestas en nuestra naturaleza cercana; donde las mayores protagonistas son las plantas, sin menoscabo de otras criaturas, donde entran en escena setas e insectos. En definitiva es una forma de compartir con vosotros hallazgos y visones particulares de esas hermosas criaturas que Manuel busca o encuentra en sus paseos.